Ignoro si es pecado, pero no
he podido resistirme a la tentación de escribir a este respecto. Es una idea
que corroe mi mente y que no me deja tranquilo toda vez que leo en el fb o
escucho a alguien decir la “nueva” frase “Dios te bendice”, que ha ido
sustituyendo a la tradicional que intitula el presente.
Bendición proviene del latín
“benedictio” que
en su origen describe la acción de decir o desear el bien, es decir, es la
expresión de un deseo benigno que se dirige a una persona o grupo de
ellas.
Según el diccionario de la Real Academia Española Bendición es el efecto de bendecir “benedicere”, acción que define como:
1. tr. Alabar, engrandecer, ensalzar.
1. Dios es Amor.
2. El fruto del Amor es la Creación
3. El Creador ama a su obra
4. Dios es responsable de lo que ama (su creación)
5. Dios cuida de su obra
En consecuencia a esa
responsabilidad Dios procura a su obra toda suerte de acciones necesarias para
que ella se sienta amada, estas acciones van desde bendiciones, hasta
correcciones. La piedra necesita de cinceladas para descubrir en ella la
estatua que esconde.
Con esto quiero decir que al
usar “Dios te bendice” o “Dios te bendiga”, de cualquier manera Dios bendice y/o
corrige a sus creaturas, estemos o no conscientes de ello ya sea que seamos
quien dice tales palabras o quien las recibe.
Creo que la diferencia
estriba en el objetivo que queremos alcanzar al decir alguna de las frases.
Para mí, “Dios te bendice”
es una frase informativa, son palabras que dicen que en esos momentos Dios me
está bendiciendo algo que, me lo digan o no, probablemente esté sucediendo. Si
el objetivo de la persona que las expresa es hacer consciente a su interlocutor
que es sujeto de bendiciones por parte de Dios, es la frase correcta.
Por otro lado, cuando yo
digo “Dios te bendiga” lo que quiero decir es que mi deseo para ti es que tú
seas sujeto de las bendiciones de Dios a pesar de que, aunque lo desee o no, tú
eres sujeto de sus bendiciones. Aquí lo que hago es expresar mi deseo,
despertado por el amor que siento por ti, de que Dios te bendiga. Es decir, estoy comunicando mis buenos deseos a tu persona que alcanzan su máximo
nivel al desearte bendiciones por parte de Dios.
Es como el saludo
tradicional de la mañana, que por tanta repetición ha caído en costumbre, y en
el cual decimos “Buenos días”. Este saludo quiere decir: “Que tengas buenos
días”. No decimos “Ya es de día” que sería una frase informativa de lo que
sucede, queramos o no, o veamos o no el sol.
Decimos “Buen día” ó “Buenos
días” como la expresión del deseo de que nuestro interlocutor tenga un buen día;
esto sabiendo que, al igual que con la bendición de Dios, no garantiza que
tengas un buen día pues esto dependerá de tu actitud frente al desarrollo del
día o frente a las bendiciones que Dios te prodigue.
A veces en lugar de expresar
un “Dios te bendiga” digo “Dios te siga bendiciendo”, pero sigue siendo mi
deseo de que Dios derrame sus bendiciones sobre tu persona.
Concluyendo: se consciente
de que Dios te bendice porque eres sujeto de su amor, y quiero que sepas que mi
deseo es que lo sigas siendo.
Así que, gracias por dedicar
tu tiempo para leer ésta publicación (y
otras), que tengas un buen día y que…
¡Dios te bendiga…!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario