E V

por ralero

Estaba sentado en mi butaca, esperando que el director de la prepa tomara el micrófono para dar la bienvenida al semestre cuando se detuvo ante mí una chica. 

-¿Está ocupado ese lugar?- me preguntó indicando el asiento a mi lado izquierdo.  

-No, adelante, siéntate- le contesté, sin poder evitarlo, más serio de lo que soy y haciéndome un poco hacia atrás para darle espacio para que pasara.

-Hola, me llamo Blanca- dijo ella cortesmente.

-Qué tal- le estaba diciendo diciendo yo...

-Somos un auditorio muy variado, ¿no?

-No- acerté a decir y volteó a mirarme sorprendida por mi respuesta- no somos auditorio, somos la audiencia. El edificio es el auditorio. 

-Ah... -dijo como sin poner atención-¿Cómo te llamas?- me preguntó.

-E - le contesté.

-Que... ¿cómo te llamas?- volvió a preguntar ella.

-E- le volví a decir- Mi nombre es E.

-¡No m... anches!-exclamó ella- ¡Claro que no! ¡No te puedes llamar "E"!

"Aquí vamos de nuevo" pensé para mis adentros, volteé mi torso hacia ella, tomé con mis manos las suyas y la miré fijamente a su rostro y, clavando mis ojos en los suyos, le dije:

-Se que es difícil de creer. Mi nombre es E y déjame explicarte por qué...

Ella se quedó un poco sorprendida, miró a cada una de mis manos sobre las suyas e inmediatamente "le quité las manos de encima..." 

-Mira, Blanca- le dije hablando pausadamente- el abuelo de mi tatarabuelo, o sea mi pentabuelo, se llamaba Rafael, al igual que su padre y le gustaba mucho su nombre pero, cuando tuvo su hijo decidió ponerle Rafael Sebastián, para conservar en la linea familiar el nombre de su padre pero que su hijo tuviera la oportunidad de hacerse llamar por el otro nombre, si acaso no le gustaba el nombre de Rafael.- Blanca me escuchaba súper atenta...

-Al papá de mi tatarabuelo,  mi tras-tatarabuelo, Rafael Sebastián, le decían Rafa y me contaba mi papá que le contó su abuelo que siempre se quejaba de por qué le habían puesto Rafael Sebastián si todos le decían solamente "Rafa"; así que cuando tuvo su primer hijo varón lo llamó Rafa Valero. Claro que en el Registro Civil tuvieron qué hacer el acta dos veces pues la primera, por costumbre, escribieron "Rafael Valero" pero él no lo aceptó así que la volvieron a hacer con el nombre de "Rafa Valero"- Blanca seguía muy atenta a mi historia...

-Pero sucedió que a mi tatarabuelo, Rafa Valero, le empezaron a decir "Raf" como diminutivo eso sin tomar en cuenta que cada vez que se inscribía en algún lado tenía que regresar para que corrigieran la licencia, el acta, la credencial o el documento que se tratara para que inscribieran su nombre correctamente: Rafa Valero, aunque (como te dije)  todos le decían "Raf". Entonces, cuando mi tatarabuelo tuvo su primer hijo varón lo bautizó con el nombre de Raf Valero, claro que tanto el párroco como el oficial del registro civil se negaban a darle tal nombre, pero él los convenció argumentando que el nombre era de origen alemán, era como "Rafael" pero germanizado, ya que la familia de su mujer era de ascendencia alemana.- Blanca puso cara como de que no m...anches, pero siguió atenta cruzando la pierna izquierda sobre la derecha, apoyó su codo izquierdo sobre la rodilla del mismo lado y colocó su mentón sobre la palma de su mano siniestra (o sea la izquierda, no la malvada).

-Mi bisabuelo, por su ascendencia alemana, nació medio rubio así que su abuelo, Rafael Sebastián, le empezó a decir de cariño "el güero de Atongo" ya que, según contaba en cada reunión como suelen hacerlo los abuelos, a su papá así le decía su Abuelita Mary, mamá de la mamá de su papá, o sea la bisabuela de Rafael Sebastián. A Raf Valero, por esas cuestiones de la naturaleza humana no logro entender, le empezaron a decir "Ra" como sobrenombre, de cariño. Con el pasar de los años, cuando tuvo su primer hijo varón le puso por nombre...

-Ra Valero- dijo ella no pudiendo evitar una sonrisa maliciosa al escuchar el nombre que se formaba al unir las dos palabras- o sea que tu abuelo es Ra Valero... jajaja- soltó la carcajada...

-Eeeeh, por eso...- le dije en tono serio pero en broma- ¿qué onda? ¿Así nos vamos a llevar...?

-No te creas E, no te creas, eh?!!!- me dijo volviendo a soltar la carcajada a la cual me uní yo.

-¡Qué malvada...!!!- le dije- Déjame terminar... Finalmente mi bisabuelo le puso R a mi papá, quien cuando le preguntaban su nombre él contestaba "R" no "erre" que es como suena la letra, sin embargo todos le llamaban "Erre", así que cuando yo nací me puso "E", para que no anduviera yo batallando con los sobrenombres o los apodos disminuidos de los nombres...

-¡Claro que no es cierto todo lo que me has dicho! ¡No te creo...!!!- me dijo ella tratando de ponerse seria...

-Nuestra Lengua- le dije yo más serio de lo que suelo ser- o sea el Español, no ese órgano muscular que interviene en el gusto y que tú y yo sabemos que está vivo, es un ser vivo. Cuando el hombre crea un concepto la lengua lo absorbe y le asigna un nombre, el cual nace, crece, evoluciona y muere; las palabras se van transformando de acuerdo al uso que le damos... Claro que no es cierto la historia de mis abuelos, pero es casi lo que pasa con las palabras que usamos a diario... Hoy es tan aceptado llamar a las personas que asisten a una conferencia "auditorio", cuando en el origen lo correcto es decir "audiencia"... No me gusta la idea de que se cambie la relación palabra-concepto debido a la ignorancia de las personas, pero estoy de acuerdo cuando se trata de la evolución de la humanidad... No me gusta tanto que me digan Rafa por ahorrarse unas letras si me llamo Rafael... Por cierto, me llamo Rafael Sebastián...- le dije tendiéndole la mano.

-Mucho gusto- dijo tomando mi mano con su mano derecha- Rafael Sebastián... ejem... está muy largo...- dijo ella sonriendo pícaramente, y poniendo su mano izquierda en mi codo...- y si te digo Rafa... de cariño...

Notas del autor: 
1. Los nombres de las personas y los lugares han sido cambiados por seguridad. 
2. No se lastimó ningún director de prepa durante la realización de este documento. 
3. Las ideas expresadas son responsabilidad únicamente del autor y... ¿quién sabe?. 
4. Cualquier parecido con la realidad es real.